El tiempo de exposición o velocidad de obturación
En tu cámara de fotos, se llama tiempo de exposición o velocidad de obturación al tiempo que permanece abierto el obturador y el sensor está recibiendo luz (está expuesto a la luz, recibiendo exposición a la misma).
La escala de tiempos de obturación que pone tu cámara será algo parecido a:
30” – 15” – 8” – 4” – 2” – 1” – 1/2 – 1/4 – 1/8 …1/500 – 1/1000 – 1/2000 – 1/4000
Estoy usando la forma corriente de escribirlo, con comillas para los segundos enteros y sin nada para las fracciones de segundo. En algunos libros y blogs verás que se está intentando usar la notación correcta, que es poner la letra s minúscula, que es la abreviatura de segundos, tanto detrás de segundos enteros como detrás de las fracciones de segundo. Correctamente escrito quedaría entonces de la forma siguiente:
30s – 15s – 8s – 4s – 2s – 1s – 1/2s – 1/4s – 1/8s …1/500s – 1/1000s – 1/2000s – 1/4000s
Al pasar de cada valor al siguiente, el sensor está expuesto a la luz la mitad de tiempo.
Todas las cámaras tienen valores intermedios, de los que el fotógrafo puede escoger uno o dos valores intermedios entre cada dos valores de la escala de arriba. Por ejemplo, entre 1/500 y 1/1000 puedo encontrar:
1/500 – 1/640 – 1/800 – 1/1000 o bien 1/500 – 1/750 – 1/1000
Está muy extendido llamarle velocidad de obturación al tiempo de exposición, lo que en ocasiones genera errores de concepto al mezclar tiempo y velocidad.
Veamos por qué:
El tiempo de exposición, como cualquier tiempo, se mide en segundos o en fracciones de segundo. 15” se lee “quince segundos” y significa que durante 15 segundos el sensor está expuesto a la luz leyendo la escena. 1/250 se lee “un doscientos cincuentavo de segundo” y significa que durante ese tiempo de cuatro milésimas de segundo (1/250 = 0,004s) el sensor está expuesto a la luz. Abreviada y coloquialmente se le llama una velocidad de “250” haciendo referencia a que si la foto se hace “a mayor velocidad” se tarda menos tiempo. Así un tiempo de 1/500s es menor (la mitad) que 1/250s y también se dice que la velocidad de 500 es el doble que la de 250. Hasta aquí aceptamos pulpo (como animal de compañía).
Los errores de concepto que se generan con esta denominación son dos.
Por una parte, hay veces que en vez de llamarlo “velocidad de exposición” se mezclan conceptos y se le llama “velocidad de obturación”, es decir, la velocidad a la que se mueve el obturador. Al llamarlo velocidad muchos usuarios piensan que con distinta velocidad de obturación el obturador se mueve a distintas velocidades. Bien, pues es un error de concepto. La velocidad a la que se abre y se cierra el obturador es fija para cada obturador. Es decir, esta velocidad es fija para cualquier tiempo de exposición, y se sitúa como máximo en torno a los 9 metros por segundo y como mínimo unos 4 metros por segundo (entre 33 km/h y 15 km/h). Esa es la velocidad a la que se mueven las láminas del obturador y no cambia al cambiar el tiempo de exposición (o la velocidad de obturación si prefieres seguir llamándolo así).
Por otra parte, hay veces que se le llama “velocidad de disparo” y se confunde, o bien con el tiempo de respuesta de la cámara (el tiempo que transcurre desde que pulsamos el botón del disparador hasta que se hace la foto) o con la cadencia a la que la cámara va haciendo fotos si usamos el modo de disparo en ráfaga (llamado también disparo continuo o disparo en serie).
En Canon y Pentax es imposible equivocar el concepto, ya que en el dial de modo de exposición el modo de prioridad al tiempo de exposición viene indicado con las letras “Tv”, valor de tiempo.
Los que no tenéis cámaras Canon o Pentax tendréis una letra “S” en el dial de modo de exposición y quizás pensabais que esa letra indicaba Speed, velocidad en inglés. Pues no, la “S” es la primera letra de Shutter, obturador en inglés.
Y, por último, aquí tenéis un par de capturas de pantalla, de propiedades de archivo de Windows y de propiedades de archivo en Photoshop en las que se puede ver que se habla de “exposición” y viene indicado en segundos, para que no quepa la más mínima duda.

